Una sesión en grupo es una excelente manera de iniciarte en la activación de la Kundalini o de seguir tu proceso de transformación personal junto a otras personas como tú.
Te recomendamos comer ligero y evitar drogas y alcohol antes y después de la sesión.
Elige usar ropa cómoda adecuada a la estación del año, sobretodo para no pasar frío en época de invierno. Y ten a mano una botellita de agua para hidratarte.
No es necesaria ninguna experiencia previa ni en el campo espiritual, ni en el físico ni tampoco en el religioso. El mejor estado para acudir a una sesión, es relajado y con la mente abierta, sin expectativas, preparado para sentir y vivir lo que suceda.
Cada persona vive su propia experiencia dependiendo de su energía vital, del momento en el que se encuentre y de la capacidad para integrarla. El despertar de la energía se puede manifestar de forma física (con convulsiones de las extremidades y del tronco, sintiendo frío, sudando, etc.), emocionales (llanto o risa) o de una forma más introspectiva y espiritual (visones de colores, conexión con otros estados y espacios).
Son muchas y muy diversas las experiencias que nos puede proporcionar esta disciplina en la que la estructura cerebral y el sistema nervioso reconectan de una forma muy profunda.
Después de una sesión de activación es recomendable iniciar un proceso de auto-observación de mínimo 4 días para alcanzar un estado de conciencia superior el cuál te ayudará a eliminar esas capas que no dejan fluir tu energía.
En este intervalo de tiempo, la energía seguirá trabajando en tu cuerpo y se acabará de integrar en tu sistema. Los síntomas que se experimentan desde las primeras sesiones, tales como claridad mental, empoderamiento , se irán desarrollando y cogiendo intensidad con la realización de sesiones.
¡Por supuesto! Solo tienes que ser mayor de edad y poder gestionar de forma óptima tanto física como mentalmente, el proceso emocional entre sesiones.
No se recomienda realizar esta práctica a aquellas personas que tienen problemas de salud cardiovasculares, respiratorios, del sistema nervioso, óseos o articulares graves.
Tampoco es recomendable en casos de trastornos mentales agudos, esquizofrenia, psicosis y cualquier otro estado mental que no permita gestionar el proceso emocional después de cada sesión.
En estados de embarazo, no se recomienda la participación en una sesión a partir de las 10 semanas de gestación. Es responsabilidad de la embarazada conocer las limitaciones derivadas de su estado y diagnosticadas por el médico para evitar posiciones que pudieran lastimar el feto. La embarazada siempre debe informar al Facilitador de su estado, antes de participar en una sesión.
Como resumen después de cientos de sesiones realizadas puedo afirmar que sí, que existe una consecuencia directa entre la activación de la energía Kundalini y una evolución positiva y sanación a nivel físico y emocional.
La activación de la Kundalini tiene la capacidad de resintonizar de nuevo tu sistema a nivel físico, mental y emocional. Trabaja directamente con todas los puntos energéticos de tu cuerpo y tiene un impacto en tus glándulas, meridianos y células.
Es importante tener presente que la activación de la Kundalini es una disciplina complementaria y nunca podrá considerarse sustituto de ningún tipo de tratamiento médico, psiquiátrico o psicológico.
Siempre son más recomendables las sesiones presenciales ya que podemos tocar a las personas y tenemos más recursos para trabajar el sistema energético del cuerpo.
Dicho esto y como sustitución sobre todo para personas que no pueden desplazarse por cualquier circunstancia, las sesiones online son una herramienta interesante proporcionando una experiencia muy eriquecedora.
¿Dudas? puedes escribrir a hola@activacionkundaliniacademy.com
